Hace ya algún tiempo que el PMI (Project Management Institute) comenzó a incorporar algunos conceptos del mundo ágil en su guía de referencia PMBOK. Pero en su versión 6, publicada en septiembre de 2018 esta guía dio un paso más en su “acercamiento” al agilismo, ¿de dónde viene esta corriente?

 

En esta entrada, voy a dar mi opinión al respecto de este tema.

En la década 00 comenzó a extenderse como la pólvora en mi sector (IT o TIC, como más te guste) la corriente de gestión ágil de proyectos. Enfoques como eXtreme Programming (XP) o Feature Driven Development (FDD) se pusieron rápidamente de moda. Pero el que más éxito tuvo sin duda fue SCRUM.

Hasta entonces todo lo que teníamos era mucho más rígido y predictivo. Ejemplo de ello era la metodología Métrica de la administración pública. Sin embargo, la construcción de software no encaja nada bien con un enfoque rígido. La gestión de un proyecto software requiere flexibilidad.

 

Parecía que los procesos ágiles como SCRUM estaban hechos a medida del sector de la Tecnología de la Información. Sin embargo, el origen de esta corriente no estaba en este sector, sino en departamentos de innovación de sectores industriales, donde habían surgido modelos como Lean y Kanban (el famoso Toyota Production System). Pero bueno, esto es otra historia en la que no entraré en este post.

 

Como te decía al inicio, la guía PMBOK en su versión 6 ha dado un gran paso acercándose al agilismo. De hecho, dedica un apartado en cada área de conocimiento para describir cómo enfocar su gestión desde una perspectiva ágil e incluso incorpora cada vez más prácticas ágiles entre las técnicas y herramientas que enumera en cada proceso. Para remate, la guía PMBOK ahora viene acompañada de un segundo libro totalmente orientado a la gestión ágil de proyectos (Agile practice guide).

En definitiva, lo que el PMI nos quiere decir con estos cambios es que es posible (y a veces recomendable) gestionar tus proyectos de forma ágil utilizando PMBOK o incluso de forma híbrida, combinando o mezclando prácticas ágiles con otras más predictivas.

Y esto lo hace porque es un hecho que cada vez encajan mejor muchas de las prácticas ágiles en proyectos de diferentes tipologías y sectores variados.

 

No se si te has podido preguntar algo así como: ¿Por qué encaja ahora el agilismo también en casi todos los sectores cuando antes parecía reservado solo para algunos de ellos?

Pues muy fácil, por el mismo motivo que se propagó tan rápido en el sector IT. Por este hecho:

Cada vez más, gran parte de los proyectos que se ejecutan en gran parte de los sectores, requieren de un alto nivel de flexibilidad.

Flexibilidad

 

Si. Es así de simple. Los proyectos, cada vez más requieren flexibilidad para su correcta gestión. Pero,… ¿Cuál es el factor común a todos estos proyectos? ¿Por qué requieren flexibilidad?

Muy fácil. Todos estos proyectos en los que encajan muy bien gran parte de las prácticas que nos brinda el agilismo tienen en común que se ejecutan en un entorno altamente cambiante. Es algo que sucedía en el sector IT desde su nacimiento, pero que, con la globalización y la alta competitividad de los mercados, cada vez es más habitual en todos los sectores: El estar sujetos al cambio.

Cada vez es más común que los proyectos que gestionas estén sujetos a un entorno altamente cambiante, donde las prácticas ágiles te permitan flexibilizar la gestión.

 

Y si he de gestionar un proyecto en el que espero muchos cambios, realizar la gestión del mismo aplicando un enfoque predictivo no suele ser la mejor idea, puesto que los continuos cambios te obligarán a replanificar el proyecto por completo una y otra vez.

Para estos casos necesitas flexibilidad, necesitas aplicar prácticas ágiles.

 

¿Qué opinas al respecto?